Ensalada de Lentejas Beluga

Aquí tienes una nueva receta: ensalada de lentejas beluga con salsa de perejil y cilantro

No sé a ti, pero a mi me encantan las legumbres, sobretodo las lentejas y los garbanzos. Este amor por la legumbre me viene de pequeña:mi madre cocinaba a menudo lentejas en cazuela y para mi era una hermosa sorpresa cuando volvía del colegio y me las encontraba en el plato. En verano nos solía cocinar una ensalada de lentejas con jamón y huevo con salsa de mostaza que me encantaba.

En esta receta he utilizado una variedad de lentejas muy fácil de cocinar, no es necesario el remojo y se cocinan en 30 minutos, muy rápido, ¿no? De veras te digo que es una receta muy rápida de hacer y con un resultado lleno de sabor. Mientras hierves las lentejas preparas todo lo demás, en un santiamén está hecho.

Los ingredientes que vas a necesitar para 4 personas:

  • lenteja beluga: unos 80 gramos por cabeza (o persona)
  • 1 pepino
  • 2-3 cebolleta
  • 1 pimiento amarillo
  • 12 rabanitos

Lo he acompañado con una salsa de perejil y cilantro que lleva:

  • un buen puñado de perejil
  • un buen puñado de cilantro
  • 2 cucharadas soperas de tahín
  • 3-4 ajos
  • zumo de 1 limón
  • 4 cucharadas soperas de aceite
  • 1 cucharada sopera de salsa de pescado
  • 2 cucharadas soperas de salsa de tamarindo
  • 1 cucharadita salsa Lea&Perrins

Todas estas medidas son susceptibles de cambiar según tus gustos y preferencias, por ejemplo, si no te gusta el cilantro (tengo una amiga que, literalmente, lo odia) no lo pones y ya está, le pones más perejil. Si te gusta mucho el ajo o poco o nada, modificas las medidas, no hay problema. Más abajo te detallo las propiedades de los alimentos y tu decides.

Pasos

  • Limpia las lentejas con agua.
  • Hierve las lentejas en tres medidas de agua, con un ajo, un trozo de alga Kombu, una hoja grande de laurel y un poco de comino durante 30 minutos. Hervirlas así ayuda a que la fibra se ablande y produzca menos gases al digerirla.
  • Limpia también los demás ingredientes. Mientras las lentejas hierven, corta el pepino, el pimiento, los rabanitos y las cebolletas en daditos pequeños.
  • Para la salsa: pon en un baso de batidora, todos los ingredientes de la salsa y bate. ¡Easy!
  • Cuando las lentejas estén cocidas, las cuelas y las enfrías un poco con agua fría. Ponlas en un bol y añades todos los ingredientes que has cortado y mezclas bien. Añades la salsa al bol y vuelves a mezclar.

Si quieres puedes dejarlo reposar unos 10 minutos para que los sabores se mezclen bien.

Es una receta versátil, tanto la puedes comer en la comida como en la cena. En el almuerzo puedes acompañarla con una sopa fría, si es verano y si es primavera, unos espárragos a la plancha casan muy bien con ella. Para la cena, puedes añadir un poco de hoja verde (espinacas, lechuga, endibia, canónigos, rúcula, etc) o bien una sopita calentita, si además pones un poco menos de lentejas tendrás un plato un poco más ligero adecuado para una cena.

A la vista de la dietética china

  • Lentejas: naturaleza neutra, sabor dulce. Tonifican el bazo, el corazón y aumentan la vitalidad de los riñones. Fortalecen la sangre y la energía. Son diuréticas. Al ser de la especialidad beluga que es de color negro, tonifican el yin y el riñón en especial.
  • Pepino: naturaleza fresca, sabor dulce, picante, amargo. Es refrescante, limpia la sangre, es diurético, humedece los pulmones y purifica la piel, tiene acción sobre el corazón, el bazo, el estómago y el intestino grueso, calma la sed. Enfría el calor.
  • Pimiento amarillo: naturaleza fría, sabor dulce. Gracias a su color amarillo tonifica el bazo.
  • Rabanitos: naturaleza fresca, sabor picante y amargo. Humedece los pulmones, fluidifica el moco, alivia la garganta irritada, ayuda a la digestión y es detoxificante.
  • Cebolleta: naturaleza  tibia, sabor dulce y picante. Al ser tibia, ayuda a equilibrar esta receta que tiende a ser fresca. Ayuda a los pulmones por su color blanco. Al ser picante ayuda a la energía a movilizarse y elimina estancamientos de sangre.
  • Perejil: naturaleza  tibia, sabor dulce y picante. Ayuda a mejorar la digestión, favorece la diuresis, elimina la humedad, al contener mucha vitamina C, favorece los vasos sanguíneos y promueve la circulación de la sangre.
  • Cilantro: naturaleza  tibia, sabor picante. Tiene acción sobre el hígado y el bazo, armoniza y tonifica el recalentador medio (sistema digestivo). Calienta. Purifica la sangre, favorece la circulación sanguínea, favorece la diuresis por lo que elimina la humedad.
  • Tahín: naturaleza  neutra, sabor dulce y amargo. Al tostar pierde el sabor amargo. Fortalece el hígado y los riñones, lubrifica los intestinos lo que ayuda a la evacuación. Nutre y consolida los tendones y huesos (gran aportación de calcio y magnesio). Tonifica el yin, el jing, la sangre y los líquidos, especialmente el sésamo negro. Tiene tantos beneficios que merece un artículo aparte.
  • Ajo: naturaleza caliente, sabor picante, dulce, salado. Es un antiséptico natural muy potente, además de ayudar a bajar la tensión. Calienta el sistema digestivo, estimula el bazo y el estómago, el corazón y el hígado. Muy depurativo, estimula la diuresis.
  • Limón: naturaleza  fría, sabor ácido. Otro gran antiséptico. El sabor ácido le otorga la capacidad astringente, es decir la capacidad de absober líquidos ayudando a la hidratación y producción de líquidos orgánicos. Muy depurativo, ayuda a limpiar la sangre y fortalece lo vasos sanguíneos. Armoniza el hígado y estimula la vesícula biliar. tiene acción sobre el bazo y el rinón, también.
  • Tamarindo: naturaleza fresca, sabor ácido y dulce. Refresca el calor, regula el bazo y el sistema digestivo. Humidifica las heces.
  • Salsa de pescado: naturaleza neutra, sabor salado. Nutre el yin. Ver sabor salado.

 

Indicada para

Se trata de una receta recomendada para la primavera y el verano puesto que la mayoría de alimentos son neutros, tibios o frescos, solo el limón es frío y solo el ajo es caliente. El sabor que predomina es el dulce que le aporta relajación, a la vez que tonifica y nos llena de vitalidad. El amargo que es un sabor yin, nos ayuda a depurar y a eliminar la retención de líquidos. El picante, también presente en esta receta, gracias al ajo, a la cebolleta y al cilantro, ayuda a equilibrar la receta, ya que un exceso de energía descendiente sería contraproducente, además de estimular la circulación sanguínea y ayudar a la digestión calentando un poco una receta que tiende a a tener un efecto refrescante.

Es una buena receta para la transición del invierno a la primavera y de la primavera al verano, porque va preparando el cuerpo para el calor que se avecina, cuidando los órganos que nos dan vitalidad como son el riñón y el bazo, a la vez que ayuda a depurar y detoxificar el organismo.

Espero que te guste la receta, si la haces, dime si la has disfrutado. Me encantará saberlo.

Hoy hay lentejas, si quieres las comes, si no, las dejas.
Anónimo

Al comer lentejas de Egipto, el hombre se vuelve alegre y divertido.
Apiano – Historiador romano

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.