Qi Gong y propiocepción - Jin Ji Du Li o El Gallo Dorado se mantiene sobre una pata

Cómo evitar y prevenir lesiones con ayuda del Qigong, además de aumentar tu salud.

La propiocepción es la capacidad de comunicación que tiene el cerebro para comunicarse con el propio cuerpo, digamos que es la toma de consciencia del propio cuerpo. Gracias al sistema propioceptivo (conjunto de receptores situados en los músculos y grupos de neuronas que están en el oído interno) se envía información al cerebro, éste sabe dónde y cómo estás situado en relación a tu entorno. La propiocepción te facilita el mantenerte erguido, coordinar tus movimientos, conducir, manejar cualquier herramienta, saber dónde rascarte si te pica algo, tocarte la nariz, etc.

Dicho de otra manera, la propiocepción es el sentido de la percepción de la postura y del equilibrio.

El cuerpo, el conjunto de músculos, tendones, nervios, envían información constante al cerebro para que éste sepa cómo estamos ubicados en relación al espacio, así el cerebro sabe si estamos en pie, sentados o echados en una cama. Junto con la vista y el equilibrio esta información es enviada y el cerebro genera un mapa posicional. Cuando hay una lesión, estos receptores propioceptivos pueden dañarse, e incluso romperse. El cansancio, los cambios de temperatura, llevar algún tipo de protección en las articulaciones (rodilleras, collarines, tobilleras, etc.) puede influir en el mal funcionamiento de este sistema propioceptivo.

Realizar ejercicios que fortalezcan la propiocepción te ayuda a que exista una buena comunicación entre el cuerpo y el cerebro, y que la respuesta en caso de necesidad sea más rápida y segura, por ejemplo: cuando te tropiezas, al realizar ejercicios que requieren rápidas respuestas del cuerpo, etc. También ayuda a mantener un buen tono muscular y a que haya estabilidad articular.

Jin Ji Du Li – El Gallo Dorado se mantiene sobre una pata

Este ejercicio de Qigong que te propongo es perfecto para mantener en buena salud tu sistema propioceptivo y, además es súper fácil de hacer y te requerirá poquísimo tiempo, menos de un minuto, al principio. Si eres capaz de realizarlo durante más de un minuto, ¡tienes premio! De hecho, si aguantas menos de 10 segundos es que tu cuerpo ha envejecido hasta los 60 ó 70 años. Pero no te preocupes, realizando este ejercicio a diario conseguirás volver a rejuvenecer. Si tienes alrededor de 25 años es posible que mantengas la posición durante este tiempo, pero a partir de esta edad, el cuerpo empieza degenerar.

Si aguantas menos de 10 segundos en esta posición,
es que tu cuerpo ha envejecido hasta los 60 ó 70 años.

⇒Explicación del ejercicio

Bien, ¡vamos a ello! Para practicar correctamente este ejercicio, debes iniciarlo con la postura Wuji, en este artículo te explico cómo se hace correctamente. Una vez en la postura de inicio, pasas gradualmente el peso del cuerpo a una sola pierna y cuando notes que el peso está bien asentado, levantas la otra pierna, doblando la rodilla, hasta ésta quede a la altura de la cintura. Si te es muy difícil puedes empezar con una posición más baja. Levanta también los brazos hasta que queden en cruz o un poco más abajo, esto te ayudará a mantener el equilibrio. Ahora ya estás a punto para cerrar los ojos, así pues, ciérralos. Respira naturalmente e intenta relajarte lo más que puedas… Te recomiendo que al principio pruebes sólo 10 segundos y vayas aumentando a medida que sientas más comodidad en la pose. Lo ideal es que lo mantengas durante un mínimo de 1 minuto en cada pierna.

Sí, al principio te será imposible, pero confía en mí, rápidamente ganarás equilibrio y confianza y podrás mantenerte más tiempo en esta postura.

La premisa importante de este ejercicio es que debes realizarlo con los ojos cerrados, eso permitirá que tu sistema propioceptivo actúe, reforzándose.

Como se trata de una postura estática, estás fortaleciendo la musculatura y los huesos. Las posturas estáticas son ejercicios isométricos (aumentan la tensión de un músculo para mantenerlo durante un tiempo), este tipo de ejercicios, aumentan la masa y la fuerza muscular, aceleran el metabolismo, lo que ayuda a quemar grasas más rápidamente, además al ejercer una presión muscular sobre el hueso provoca que haya un crecimiento de masa ósea, esto no lo digo yo, lo dice la Fundación Internacional de Osteoporosis. En un artículo que estoy preparando, te hablaré de otras posturas estáticas de Qigong.

Y no sólo esto, según la Medicina Tradicional China, por las piernas discurren los meridianos del hígado, del bazo y del riñón, también los meridianos del estómago, vesícula biliar y vejiga. Al mantener el equilibrio sobre una de las dos piernas estás fortaleciendo la energía de estos órganos y entrañas y sus funciones, ayudando a que la energía fluya sin bloqueos y mejorando su nutrición.

Bajo la visión de la Medicina China, este ejercicio tan fácil te ayuda a:

♦ Mantener un cerebro fuerte y sano, y a tener una buena memoria.
♦ Equilibrar tu tensión sanguínea.
♦ Evita el síndrome de pies y manos frías.
♦ Ayuda al bazo en sus funciones de regular el azúcar en sangre.
♦ Beneficia a la columna vertebral.
♦ Procura una buena calidad del sueño y mejora el insomnio.

¡Anímate a hacerlo durante 15 días seguidos y me cuentas tus resultados!

“No tengo tiempo” es la versión adulta de “el perro se comió mi tarea”

Anónimo